4 dias en Estambul y poco presupuesto

Llegando a Estambul:
La mayoría de los hostales baratos se congregan en el barrio de Sultanahmet. donde si bien uno se siente que forma parte de un decorado (todo gira por y para el turista) tiene la ventaja de estar cerca de muchos puntos de interés.
Desde el aeropuerto Ataturk hasta el barrio de Sultanahmet:: Tomar el tren ligero LRT y bajarse en Zeytinburnu. ( 6 paradas) Alli cambiar al tranvia con direccion Kabatas, y bajarse en la parada: sultanahmet(son unas 17 paradas) Esto cuesta 1.90€
Para tomar el tranvia hay que comprar los billetes, al bajar del tren, no sirve el mismo.
Si llegas tarde ten en cuenta que el ultimo tranvia sale a las 12 de la noche. Hay un vuelo de Lufthansa que llega 23.00 hs al aerpuerto y si todo va bien, puedes agarrar el ultimo tranvia.
Los ciudadanos Españoles pagan un visado de 15 €, que se saca unos metros antes de llegar a migraciones.
No pagan los italianos, franceses, y casi toda latinoamerica.



Circuito base de Estambul: la ciudad está despertando a la modernidad, aunque en cada esquina quede un vestigio del imperio que fué.
El casco antiguo, donde se suelen concentrar la mayor parte de los hostales baratos es de muy fácil recorrido y muchos puntos de interes se encuentran alli.
Cámara de foto en mano, uno puede dejarse perder por las calles adoquinadas sin preocuparse de mapas, ya que con solo alzar la vista, la imponente boveda de alguna mezquita le volverá a ubicar.
Casi todas las callejuelas que salen del barrio de Sultanahmet, y siguen la ruta del gran Bazar, te arrojarán a la orilla del bósforo.
Este  ajetreado río divide a la ciudad en 2, separando la parte moderna de la antigua.
Junto al puente Gálata, somos testigos del dia a dia de la poblacion turca. De los ferries que conectan la orilla Europea de la Asiática, baja y sube gente sin cesar a lo que podemos sumarnos por escasos 0.85€. En el puente, los pesacadores aficionados pasan horas lanzando la caña al rio, transitado sin cesar por ferries y lanchas.
El olor a pescado a la plancha no deja indiferente a nadie y es un placer sentarse en cualquiera de los puestos a comer el típico sandwich de pescado( 2/3€)y contemplar la gente pasar.
Cruzando el puente de unos 150mts se llega al barrio de Beyoglu.
La primera parada es el rústico mercado de pescados, donde (si aún no se probó) hay otra oportunidad de sentarse en sus improvisados restaurantes y darse un gran homenaje a base de pescadito frito, o a la plancha.
A partir de alli, se alza en empinadas cuestas el barrio de Beyoglu.
Lo primero que encontraremos es la torre Gálata, donde podemos subir para admirar las increibles vistas de las mezquitas de la parte antigua y  luego seguimos subiendo, sin prisa, pero sin pausa, porque son al menos 400mts de empinado ascenso, hasta que llegamos al boulevard ISTIKLAL CADDESI.
Alli Estambul muestra todo su esplendor de ciudad Europea: tiendas, restaurantes, y cafeterias , congregan a ríos de gente que la camina de arriba a abajo durante todo el día sin parar.
Al  final de esta calle, se encuentra Plaza Taksim, considerada el corazón de la Estambul moderna.
Para volver al barrio de Sultanahmet, uno puede hacerse con la ilusión y la fuerza de que iremos en bajada, o tomar el tranvia que te devolvera al mismisimo sitio donde comenzó el itinerario.